Jugar con objetos cotidianos permite a los niños
aprender nuevas e importantes lecciones, y además les encanta. Por eso, en
muchas escuelas infantiles los bebés juegan con el “cesto de los tesoros”. Se
trata de un cesto o cajón con objetos de diferentes materiales, pesos y
texturas para que los niños experimenten.
En este juego,
los niños
manipulan elementos de la naturaleza o de su entorno cotidiano. Estos objetos,
por su variedad de formas, texturas, colores y olores estimulan los sentidos y las
capacidades (motrices, cognitivas, comunicativas...) de los bebés, lo que
facilita su desarrollo.
Esta actividad está indicada a partir de los seis meses (cuando son
capaces de permanecer sentados) hasta el año aproximadamente.
¿En qué consiste el juego de "el cesto
de los tesoros"?
- Los bebés juegan en un
lugar tranquilo. El elemento central es una cesta o caja de unos 8 cm
de altura, sólida y estable que no se vuelque cuando los pequeños se
apoyen en ella para sacar lo que hay dentro. Conviene que no tenga asas y
que los remates estén perfectamente redondeados para evitar que los
pequeños se arañen.
- Dentro de esta cesta se
meten unos 50 objetos que no sean juguetes
comerciales, sino cosas que los bebés pueden encontrar a diario en la
naturaleza o en casa: piedras, castañas, corchos, trozos de esponja,
conchas, peines, cajas, botones grandes, cepillos, pinceles, pinzas de la
ropa, bobinas de hilo, etc.
- La sesión de juego dura
una media hora y los educadores están muy pendientes de los bebés para
evitar que se metan en la boca objetos pequeños.
- Este juego da al niño la
oportunidad de aprender por sí solo.
¿Qué habilidades desarrollan los bebés jugando con objetos cotidianos?
- Ejercitan su autonomía
y su capacidad de elegir y decidir, ya que nadie les dice lo que
tienen que hacer.
- Los sentidos. Su vista, oído, tacto, olfato,
incluso el gusto
se van desarrollando mientras manipulan libremente esos objetos. Además,
este juego les permite ir interiorizando conceptos como volumen,
capacidad, equilibrio, cantidad, etc.
- Estimulan la coordinación
corporal y las habilidades
manipulativas, la presión y la suelta de objetos; la pinza digital
(coger cosas pequeñas con el pulgar y el índice); la atención y la concentración.
- Favorecen la
socialización, la interacción y la comunicación con otros bebés, así
como la creatividad, ya que cada niño puede hacer con los
"juguetes" del cesto de los tesoros lo que quiera y a su propio
ritmo.
- Es una actividad física muy interesante, pero sobre todo mental, ya que estimula el aprendizaje a base de experimentar, explorar e investigar.
Fuente: www.serpadres.es
Ahora veo de dónde le viene la curiosidad y el investigar en cualquier bolso o cajón jijiji me encanta!
ResponderEliminarQué interesante,se les ve súper concentrados!!muchas gracias por compartir vuestro trabajo con nosotros, me encanta y a los peques ni te digo!!Vera está cada día más feliz en la escuela!!
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